GENOCIDIO, TECNOLOGIA, EGOSIMO Y PODER

La humanidad del siglo XXI está viviendo un genocidio en tiempo real, todo es cierto los niños mueren, los adolescente, los adultos, los abuelos;  asesinados por los bombardeos del país que los escogió como enemigos, a lo mejor todo a aquellos que hablan los historiadores sobre lo que paso con el  pueblo judío en la segunda guerra mundial siglo XX, puede que tenga realidad, la diferencia es que la inmediatez de la tecnología hace que la imagen de este holocausto se pase de una manera fría, calculada, programada, repetitiva e invasiva en los hogares del mundo, o sea  que el exterminio de esta población esta en vivo y en directo en cada hogar del mundo. Por ende esa es la humanidad del siglo XXI homicidio en masa y visualización en red. Puede ser parte del drama o facetas de la sociedad del siglo XXI.

Un panorama apocalíptico: hambre, muerte, dolor, destrucción, epidemias. El ¿Por qué?, ¿cómo?, ¿Cuál es la justificación para ello?, puede haber infinitud de preguntas y a lo mejor de respuestas, lo único cierto es que existe y la barbarie humana, está presente.

Ese lado oscuro de la especie humana tiene protagonismo en este genocidio, las tragedias de Shaquespeare, o de Sófocles se quedaron cortas para mostrar la capacidad de daño del homo sapiens (hombre pensante) que contradicción ¿Qué entre más pienso más mal?   

El filósofo del siglo XXI no es ajeno a esta realidad y él es el llamado hablar o escribir de ese panorama apocalíptico que diariamente se lee, se oye, se ve, y entra a la cena diaria de los hogares de occidente, que a lo mejor se visualiza como un hecho más, algo más que esta en redes, en noticias, de algo hay que hablar. lo único cierto Thomas Hobbes (siglo XVII) dijo: “el hombre es un lobo para el hombre” (Homo homini lupus): en su obra Leviatán dijo que los seres humanos están impulsados por egoísmo y la búsqueda de poder.

Entre más poder más daño se podría afirmar con este exterminio, la pregunta ¿Qué hacer? La mayoría dirá nada, no es mi asunto, el mío es trabajar, para producir lo que necesito para tener una vida digna, o sea ¿Qué entre más tengo más dignidad?, y el ¿otro qué? muere, queda sin hogar, esto no me perjudica mientras, el otro no este en mi mundo subjetivo.  Se critica mucho a los materialistas por su objetividad ante la realidad, ¿será que el ser humano es más racional que moral?

Perdóneme por entrar en su mundo e incomodarlo con estar reflexiones no muy gratas, ni divertidas que también se venden en

las redes, como también hago parte de ellas, y escogí la pregunta, sobre un genocidio que toca mi alma, mi ser y mi dignidad, y decidí escribir este texto, hoy son ellos, a lo mejor mañana puede ser otro, y en esta ruleta de poder y egoísmo, no se sabe cuando nos tocara a nosotros, y viviremos la misma inmediatez. La tecnología y la historia lo dirán.